EL ABANDONO VIAL COBRA NUEVAS VÍCTIMAS EN EMBARCACIÓN
Prensa FM Magica 989
Un accidente que pudo terminar en tragedia volvió a poner en el ojo de la tormenta el deplorable estado de la Ruta 34, esta vez a la altura de Senda Hachada, en la jurisdicción de Embarcación. Cuatro ocupantes de un vehículo, presuntamente una Ford Ecosport, luchan por sus vidas tras volcar violentamente al intentar esquivar los innumerables pozos que convierten a esta carretera en una trampa mortal. El asfalto, lleno de cráteres y olvidado por las autoridades, fue el culpable de este nuevo drama que sacude al norte argentino.
El vehículo transportaba a tres mujeres y un hombre. Según los primeros reportes, el conductor perdió el control al enfrentarse a la caótica calzada, y el automóvil acabó fuera de la ruta, en una zanja al costado. El hombre sufrió traumatismos leves, pero su situación se complicó al ser atacado por un enjambre de abejas tras impactar un panal durante el vuelco. Las dos mujeres que lo acompañaban presentan graves traumatismos en la espalda y el tórax, además de picos de hipertensión que agravan su estado. La tercera pasajera, con un fuerte golpe en la cabeza y cortes en el cuero cabelludo, fue trasladada de urgencia a Orán, aunque permanece consciente.
La escena es desesperante: en una región donde los traumatólogos brillan por su ausencia, los heridos dependen de un sistema de salud desbordado y de traslados improvisados. “Esto es una vergüenza nacional”, denuncian los vecinos, hartos de ver cómo la Ruta 34, una de las arterias clave del norte, se desmorona sin que nadie haga nada.
Por este corredor pasan a diario camiones, familias y trabajadores de San Martín, Rivadavia, Santa Victoria y Orán, pero los poderosos parecen no notarlo. Diputados, senadores, intendentes y concejales esquivan el problema: muchos, como la diputada Orozco, prefieren los helicópteros antes que pisar el asfalto destrozado que los “mortales” deben